Mostrando entradas con la etiqueta Angustia. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Angustia. Mostrar todas las entradas

domingo, noviembre 09, 2008

Y en total, en todo este tiempo, cuántas rosas más...




Sé que estoy desfasada, que hace un año que ha salido, pero no quiero dejar de decirlo: es una película bien hecha, y sin embargo, me ha causado desasosiego.
Ha acabado y me he encontrado en una situación incómoda. Sin saber qué pensar. Dándome cuenta de la complejidad del asunto.
Al tiempo, he pensado, ¡Dios! ¡esto ha sido real!, y ¿cuánta gente no se habrá sentido identificada? ¿cuánto odio no se habrá creado por culpa de la guerra? Joder, todavía lo estamos viviendo hoy. Nietos, biznietos... ¿hasta cuándo seguiremos en esta especie de rencor de postguerra?
Algo ha quedado patente pese a todo, algo que para mí tiene rotundidez absoluta: NO PODEMOS OLVIDARNOS.

Dicen que el pueblo que olvida desaparece.
No podemos.

Aunque volver sobre lo mismo nos resulte desagradable. Porque a mucha gente le gusta escapar de las miserias, pensar que no existen, vivir en los mundos de Yupi, hasta que le llegan las propias.

Tenemos que recordarlo, investigarlo, reivindicarlo, hacer justicia si es que aún se puede. Pero tenemos que hacerlo de un modo serio y responsable y lo que no podemos hacer es generalizar porque la complejidad viendo casos particulares es máxima.
Y si todo esto ha de servir para algo, será para en la medida de lo posible no volver a repetir los mismos errores, pero nunca, nunca debe servir para alimentar los rencores que no irían a ninguna parte, porque hay que darle un sentido a tanto sacrificio humano. Me niego a pensar que no ha servido de nada.
Esta es mi modesta opinión, sin más pretensión porque tampoco soy una experta.
Añadiré ya de forma poco elegante que si alguien se queja alguna vez de la gente que hace Historia o se interesa por la Historia acusando de meter el dedo en la yaga simplemente le diré lo siguiente: Que se joda.
No dejaremos de hacerlo porque es necesario.

miércoles, noviembre 05, 2008

I WILL SURVIVE..... Ouh Yeahp


Si no fuera porque hace daño a la vista, escribiría con letras de oro. I Will Survive.
Lo haré. ¿lo haré?. ¿seré como el ave fénix que renace de sus cenizas?. ¿seré tan avispada como los que convierten las miserias en oportunidades?. Debo decirmelo, lo haga o no, I will survive.
Debo hacerlo porque renunciar te lacra. Cobarde de por vida. No es un título que quiera tener ni que pueda ostentar nadie con orgullo. Estaría feo tirar la toalla, sobre todo sin saber qué es lo que nos espera a la vuelta de la esquina. Sí. Por la calle del dequicio. La mía tan intricada que tiene más esquinas que Santa Cristina de Lena.
A día de hoy. Estoy harta. Miro hacia atrás y digo," joer, no evoluciono, llevo años igual, ¡¡¡odiando tomar decisiones!!!" Claro, pero no me extraña, porque hace mucho ya que no consigo tomar una al derechas. Si dejase de equivocarme tanto no tarrecería tanto decidir.
Me equivoco tanto que temo equivocarme diciendo que me equivoco. Pero en general, dejar que use mi intuición que además se presume de femenina y la femenina tiene fama de ser casi casi infalible.

sábado, octubre 11, 2008

ENCORE ET ENCORE ET ENCORE UNE FOIS



Toujours pareil, j'ai en marre, je ne le soupporte plus. Je ne l'aime pas. Je ne veux pas en retourner encore, mais oui, je suis là, encore et encore et encore une fois, sur le même point.


Même si je crois avoir fait des taps de trucs pendant tout ce temps là, je n'ai pas bougé.


Comment arrêter cette histoire sans fin? cette histoire que toujours arrive au point de départ. Si coquine qu'elle me semble chaque fois différente, et pourtant elle est toujours la même.




Là je m'arrête, je prends de l'air. Je me dis encore une fois, j'ai en marre. Je me dis aussi à nouveau, ok, c'est égal, je m'en fous, je n'en ai pas besoin. Mais maintenant je commence a identifier ces moments d'évanousiment, d'atourdisement et de folie. Parce qu'ils ne viennent jamais a moi par première fois, et non plus par dernière.




Je ne trouve pas la façon de m'en fuir de la prison que j'ai construit moi même tout autour de moi.






lunes, agosto 18, 2008

A silent city


Cómo puede cambiar una ciudad cuando sabemos que alguien ya no está en ella.
Podemos verla vacía, desierta.
De pronto ya no hay más gente que encontrar, sólo cruzamos fantasmas, sombras que en absoluto nos interesan.
Dejamos de fijarnos en los rostros porque sabemos que el suyo ya no estará, ya no estará, ya no estará... igualmente, ahora parece que queda más aire para vivir y respirar.