El palacio del hielo

Os acordais de cuando vivia en RoseTown? pues ahora vivo junto al Palacio del Hielo. ¿Será una señal?. Hoy ha sido el primero de los días de lo que se supone que será mi vida "normal". Me he aburrido como un burro en un campo de amapolas. sola en casa después de desvariar en el archivo, después he llegado y me he hinchao a comer, justo antes de deshidratarme por culpa de la calefacción central. Haré lo posible por cambiar esto... no sé, primer paso: prof de guitarra, segundo paso y si no hay más remedio... gimnasio! por lo menos eso te ayuda a mantenerte ejem depilada! jaja

La vida es maravillosa

¿Cuántas cosas se pueden hacer en un día?
Pues dormir en un colchón, tomar una ducha, arreglar unas gafas rotas tras comparar precios y eficacia-tiempo de arrego en ópticas, recoger un paquete en correos, llamar a un instituto que pasa de mí, comer comida árabe, mudarme atravesando Madrid con doña Garfer y arrastrando maletas, ropa colocada, habitación decorada, me voy a la librería, a una presentación de un libro de cocina omaní con degustación de los platos incluida y acabo tomando un café con el subdirector de la casa de Siria en el salón a lo más puro estilo diplomático, mi amiga acaba con cursos de árabe y alemán gratis, puede que también una excavación... y tenemos pendientes unos tés el viernes y unos pastelillos de Siria. Llego a mi nuevo hogar madrileño y las compañeras son aparentemente majas, en casa hace calorcito y lo único malo es que cada vez que alguien usa el secador se bajan los plomos pero a mí me hace gracia. La vida es impredecible y cosas maravillosas ocurren.


Si a esto sumamos la semana de parranda con Marta, mi breve estancia en Barna y el haber podido ver a Olga, a Sheila y a Borja... si pienso que hace un año nadie me hubiese dicho que iría dos veces a Barna, y que hace dos meses nadie me hubiese dicho que hubiese vuelto otra vez...

:-)

... y todo esto, la incertidumbre y todos vosotros haceis mi vida más interesante. GRACIAS.

El cigarrillo

Si la superación del fin de una relación se compara a dejar de fumar, hace dos días tuve una recaída, me fumé un cigarrillo.
El humo del cigarrillo no me ha llegado hasta hoy, en forma de email. No lo he abierto aún. Contemplo una y otra vez ese "Recibidos (1)" de la bandeja de entrada. No estoy segura de querer saber de su contenido, sé quién lo envía y para mí es bastante. Ayer decía que me estaba demostrando que había salido con un cretino, ahora retiro mis palabras, y no sé qué me dice el email pero no será nada que cambie mi vida, desde luego que no. Me he dado cuenta de que leer ese mail puede ser EL cigarrillo que necesito para recaer, para llenar mis pulmones de humo canceroso. ¿De verdad lo quiero? Durante 3 meses he guardado una semiabstinencia y tras 3 meses la he cagado, me he dejado sentir... ¿verdad que no tiene sentido?
En todo este tiempo mi corazón no ha dejado de latir como el de un corredor de maratón, estoy mareada como si hubiese hecho al menos unos 5 kilómetros. Tanto si lo leo como si no me va a dar algo.

Libro blanco de Lorena (aún 4-2-10)

Dilemas de una autora respecto a su personaje.

¿Cómo se desenvolverá la historia de Lara? La verdad, no lo sé. Parece que las fuerzas que movían a la autora y que hacían que ésta moviese a Lara ya no están.
Sobra decir que Lara es como un alter ego, por supuesto que lo es.
Lara es muchas cosas, tiene rasgos de mi persona, de Luz y de más gente, pero Lara iba a hacer algo que me hubiese gustado hacer y nunca hice ni haré. Lore no es Lara, por muco que hasta sus nombres se parezcan.

Empecé a leer "Más Platón y menos prozac", un muermo, lo que dice podría ser muy útil y alentador pero el libro no está bien escrito (o traducido) ni bien estructurado, no sabe mantener la atención y eso que yo suelo leer cuanto cae en mis manos. Es curioso pero las partes que más me han podido servir son las referentes a la crisis existencial y a las pérdidas humanas. Pos sí, he vivido lo de Whisky un poco como una muerte. "Alegrate por los momentos felices vividos y agradece el ahberlos conocido", sí, sí, bla, bla, bla, pero yo quería y quiero más.

La lectura me hizo prepararme muy receptivamente para lo que vino después. Antonella me envió una película colgada en Youtube "El secreto"; resulta que la hay en español aunque yo la vi entera en italiano, enfin era más gracioso. El caso es que hablan de cosas, desde un punto de vista flipado, pero muy cierto: con los pensamientos acutales cramos nuestro futuro.
Lo semejante atrae lo semejante (es cierto, el poder de la sujestión es enorme).
El mundo está lleno de cosas que nos gustan y nos desagradan, cosas que buscamos, cosas que evitamos y nosotros nos infravaloramos cuando no vemos que somos capaces de elegir qué ver; llámese sugestión, llámese ley de atracción.
Pensamos que el universo nos manda señales, pero es nuestra mente la que las descubre donde siempre han estado, sólo que ahora las reconoce y las dota de significado ¿por qué? porque tenemos un propósito; cuando queremos algo con fuerza y enfocamos nuestros pensameintos de modo positivo hacia ese propósito todo parece conducirnos a su consecución, y los buenos sentimientos que tenemos nos indican que estamos en el buen camino.

Esto no es parafernaria de secta, es la verdad. Tenemos que vernos capaces para crear capacidad.
Respecto a mi crisis existencial, he decidido que si yo tengo el poder de elegir si ser existencialista o no y soy más feliz no siéndolo voy a cambiar mi modo de actuar y pensar. Si pensar que soy un accidente, que mi vida no tiene sentido y el nihilismo me arrojan al desamparo... abrazarme a todo ello sólo me convierte en masoquista (vaya con Matrix I, qué buena película). He de pensar lo que dice el libro, si soy un accidente, ¡más motivo para celebrar mi vida! ¿y cómo hacerlo? Sintiendome orgullosa.

Me ha ayudado mucho pensar que los sentimientos me guían. Cada vez que haga lo adecuado sentiré satisfacción. Una vez sabes esto te preguntas por qué no lo has sabido antes y pierdes el miedo a equivocarte porque una alarma saltará en tí para avisarte de si estás siendo coherente contigo o no.

Volviendo a Lara, no sé qué va a pasar con ella. Ella era mi proyección. En la película "El secreto" dicen que poetas, pintores... proyectaban lo que querían mediante su arte y así lo conseguían materializar; yo en cierto modo era lo que quería pero cuando he comprendido que tal vez podái tener buen resultado dudé. Tal vez ya no quiera tanto estar con Whisky (el hombre que me ha hecho llenar páginas en este libro, acabaré poniendo su nombre en la portada, jaja a modo de título).

Bueno, lo que pasa es que si puedo conseguir lo que quiera, ¿no sería mejor querer olvidarle? ¿querer pasar página? ¿querer encontrar a alguien mejor?

Es como cuando me compré la guitarra, aun no la toco pero lo conseguiré. Me gustaba que Whisky tocase la guitarra, la guitarra me recuerda a él en cierto modo, pero es mucho más, me gusta en sí misma y es una de las causas de que él me gustara y no al revés. Me gustaba también que Whisky tuviese la ambición de ver mundo, de hacer viajes, pero eso, obvio, me encanta por naturaleza, y era y es y será uno de los requisitos sine qua non un chico no me puede llegar a gustar. Su mente inquieta, su amabilidad, su fuerza de voluntad... me gustan de él y me gusntan en sí mismas y en cada persona en la que las descubra, es más, quiero esas cualidades en mí, en mí misma; quiero proyectar en mí mi vida ideal y autorealizarla, no a través de terceros. No necesito a alguien que se parezca a cómo yo quiero ser, necesito llegar a ser.

Como Lara me cae bien, voy a desplazar su historia en el tiempo, un poco más al pasado, cuando no había móviles ni internet, así no parecerá tan gilipollas como lo parecería en el siglo XIX. Voy a mantener el final, pero para mantenerla enamorada voy a tener que echar mano de mi imaginación o darme prisa, porque si mi amor por él se acaba antes de que Lara llegue "a meta" nunca llegará. Tic, tac, tic, tac... mi personaje se ahoga tiene meido de no avanzar, de quedarse atrapada. "Tranquila Lara, haré todo lo que pueda por tí proque creo que de toda esta historia se puede sacar provecho".

Asocié todo el discurso de "El Secreto" con la película alemana ganadora de un Óscar, "La vida de los otros". El protagonista escribe un libro en el que agradece todo lo hecho a un anónimo al que no llegó a conocer, ese hombre leerá el libro, de igual modo que millones de personas, pero sabrá que se refiere a él. ¡Él es alguien importante! ¡el protagonista de un libro, el inspirador de una obra! y se sentirá gratificado.

Yo hice una mélange de todo esto en mi cabeza, me dije: "Imagínate, Lorena, que toda esta experiencia te conduce a escribir una historia que nfucna hubiese surgido de no ser por lo vivido. Imagínate que es una historia buena, que se publica, se vende y se lee. Imagínate que llega a sus manos, que se reconoce en ella y que impulsivamente se pone en contacto contigo. Imagínate que la ruptura ha supuesto el comienzo de un mundo perfecto en el que por fin escribes, haces que la gente disfrute con lo que creas y tu gran amor te busca desesperadamente porque quiere estar contigo. Sí, mi gran amor, porque hasta el momento lo es. Pero si quiero escribir la historia debo hacerlo por el hecho mismo. Tal vez para cuando acabase la historia su opinión, indiferencia o desconocimiento no me importarían lo más mínimo.

Hoy he comprado billetes de avión para Egipto. Madre mía ¡Egipto!. Empeizo a vivir, vivo mi vida. En la vida de la que me siento orgullosa no pierdo oportunidades así :-)
Estoy contenta de haber tomado la decisión de irme, tengo razón cuando digo que si tengo tiempo y dinero y no voy, soy gilipollas. Con el curro no voy muy bien, sigo sin estar segura de hacer lo correcto pero si que es verdad que gracias a él puedo disfrutar mucho, si me focalizo en las cosas buenas del curro me va a encantar, me voy a sentir afortunada por tenerlo y voy a hacer lo posible por mantenerlo.

Por inercia sentimental

Por inercia sentimental voy a reescribir lo que le he puesto a Mery en un coment: "yo estoy, no sé, enfadada ahora mismo con el mundo, decepcionada, frustrada y lo peor, sigo enamorada y sé que ahora mismo SÓLO está a 1.600 kilómetros de mí, a hora y media de vuelo y dos horas de autobús, a veinte minutos andando cruzando un puente para verle en su bar favorito y podría hacerlo, podría.".

Me doy cuenta más que nunca de que la distancia no importa, le temo más al tiempo pero para determinadas cosas el tiempo tiene su propio ritmo, paradójicamente atemporal.
No sólo podría hacer todo eso sino que me encantaría.
Me gastaría un dineral en ese billete de avión, me pelearía por la plaza de autobús, caminaría descalza esos veinte minutos hasta el bar y ahí si hace falta invitaría a una ronda "a too dios". Pero, ¿de qué sirve la disposición personal en estas cosas que son cosas de dos?

Trato radical a las musas o cómo hacer que no vuelvan nunca más

Se han ido y no vuelven. Supongo que volverán, en algún momento aparecerán, porque se dice que nunca abandonan a nadie del todo, lo único que pasa es que cada vez visitan menos a determinadas personas a las que les cogen manía, entonces esas personas comenzarán a acusar de menos momentos de lucidez de los que normalmente tenían.
Yo voy a esperarlas, pacieeeeeeeeeentemente, pero no me van a pillar desprevenida, les estaré esperando con una trampa, las atraparé y no permitiré que se vayan otra vez de paseo.
Puede parecer una solución radicial, lo sé, puede que no se les pueda atrapar, seguro que se las saben todas. Entonces no habré conseguido más que hacerlas enfadar y ya no querran volver a saber de mí nunca más, pero de algún modo tendré que demostrarles mi enfado... enfin, estudio o mejor dicho, hago como que estudio y me rallo con fricadas, cada vez soy más freak, supongo que en eso consiste la educación de postgrado... con tal de no darme asco a mí misma... espero que no pase, faltaria!
No puedo echarle la culpa a mis lecturas no literarias, tiene que haber algo más, ya no soy la misma, ya no escribo como antes y como no creo en el destino y como no creo en nada, tengo que inventarme absurdos a los que echar la culpa de todo, así de irresponsable soy!

Debí besar la piedra de Blarney (o como se llame) y no conformarme con mirarla de lejos. Había un boquete en el castillo y tenía miedo a caerme, además el hombre que sujetaba a las turistas miedosas aprovechaba para tocarles las tetas así como quien no quiere. Podía haberme comido mi vértigo y mi orgullo, podía haber besado la piedra que da el don de la palabra, no se hable más, cuando vuelva a Irlanda que me sobe si quiere que yo tengo que morrear a una piedra!
Oh musas gracias por la idea!