sábado, enero 13, 2007

Con la vida social en los talones

Es que cuando la encuentro me cuesta un montón escapar de ella, y no es época que hay que estudiar! Tengo tan pocas asignaturas que es superchungo subir la media y no es nada difícil bajarla.
Me empiezan a gustar de verdad algunas asingnaturas, sobre todo las que implican hacer algo más que chapar. Si, me gusta la investigación. Ahora me he propuesto meterme si puedo en una asociación que se dedica a hacer archivos sonoros y documentales sobre Asturias entrevistando a gente mayor e intentando registrar todo lo que se va a acabar de modo irremediable antes de que se borre todo rastro o posibilidad de recuperación del pasado histórico.
Me hubiese gustado darme cuenta antes y hablar largo y tendido con mi abuelo sobre muchas cosas, pero nunca lo haces porque cometes la estupidez de pensar que siempre estará allí. Es un error, todo se acaba, y a veces esa futilidad es lo que nos hace movernos.

Nos fuimos unos 35 al albergue de Pinzanes. Estaba mono, con muchas figuritas de los 20 duros y todo eso. Nos cogimos la habitación guay, teníamos baño, pero muy pronto descubrimos que no era tan guay, porque en todo el albergue solo había ese baño y el del pasillo, así que todo el puto día entraba y salía gente medio en bolas de nuestra habitación!
La alberguera era una borde que experimentaba con nosotros lo que aprendía en sus cursillos de cocina, y va en serio, todos los días se piraba a Oviedo a sus clases y a la hora de la cena nos convertíamos en sus cobayas.
A los nueve que nos tocaba la misma parroquia nos dejaron el patrol de Geología. Vaya birria! parecía que íbamos en camionetu! tanta seguridad en los tiempos de hoy y ni airbarg, ni cinturón de seguridad, ni asiento prácticamente pa los cuatro que iban a granel atrás!
El que hacía de chófer era un temerario que casi nos desgracia y puso el patrol a dos ruedas, luego dijo "no pasa nada" claro, pa que pase algo pa él debe ser que el coche tiene que dar tres o cuatro vueltas de campana! jajaja otra vez nos quedamos contemplando el paisaje de la niebla rodeada de montañas y tal bajo un precipicio, pero el chaval con su buena intención: "esperad que os acerco pa sacar fotos" nooooooooooo! menudo sicópata! jajaja
Luego con lo del trabajo en grupo discutimos bastante. El que no es teatrero es un celero y si no un pesimista o un pasivo, no es que yo no tenga güela, pero joer! las cosas o se hacen bien o mejor no hacerlas!
Los pueblos daban mucha pena, y bien por esto, o porque no logremos nada hasta entrada la noche, o porque tenía la regla y pocas veces estuve tan hormonada... me echaba a llorar por nada!
Tuvimos la mala puntería de ir a llamar a la puerta de una casa donde hacía una semana había muerto el hijo de cuarenta y un años dejando a dos niños pequeños, el paisano hacía tres dias salió del hospital y tenía marcapasos y la paisanina se puso a llorar y tuve que abrazarla y todo con lo que yo también me eché a llorar. Luego nos fuimos a otra casa y... casi que más de lo mismo!
Las noches de juerga. El primer día cogimos las almohadas y nos fuimos a meter de hostias a los de geografía jajaja que tontos que son! luego les dimos a las de arte, vale, eramos casi 20 contra dos, pero es que son muy pijas y les tenemos un poco de mania, pobrecillas! jajajaja.
La gente contaba pila de historias por ahí. Tesoros, castros, túneles de los moros, hijos ilegítimos de los curas...
Me metí con uno por el monte, lleno de pinchos pa buscar unas ametralladoras y una zanja de la guerra civil pero no vimos nada porque la maleza lo cubría todo. Al menos salimos a artarnos, porque el resto ni salió del coche! no, que va! estaban ahí dando ánimos "eso que haceis no vale pa nada! quiero marchar ya a casa" y cosas por el etilo...
La gente hablaba con mucho miedo de Campo Castiello, un prao en el que hay un castro. Siempre hay historias extrañas en torno a los castros, tienen un nosequé que los convierte en blanco de todo tipo de leyendas. La gente decía que habían visto bailar ahí a las brujas, o que de noche se oían ruidos y entierros.
cuando de noche nos juntamos con todos unos pocos quisimos hacer expedición nocturan hasta el castro pa ver si veíamos las brujas! jajajaja somos un poco flipaos y tal. La cosa cambió cuando algunos vieron que se hacía en serio, todos empezaron a rajarse y el que parecía el más valiente decía: " a ver, yo nun ye por nada, nun creo ni ná, pero solo digo que si los paisanos tienen tanto miedo será por algo". TOTAL QUE EN GENERAL LA PEÑA ACOJONÓ.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

hola LO!! te escribo un pequenito mensaje para decirte que no he desaparecido aunque el fotolog esta cerrado, pero necesito tiempo para re-construirme después de ma historia de amor de p... m... El amor es cosa muy mala!!! sé que digo tonterias, pero, una cosa que te rompe el corazon es cosa buena??? muchos besos, JEFF
si quieres escribirme: jfs_rojon@yahoo.fr

Anónimo dijo...

Para el de arriba. ¿Quién necesita el amor? No, mejor el roce puramente carnal, no digo que se deba renunciar al cariño pero el amor, el amor..., no gracias. Se te nota que eres francés, por el acento digo. El Louvre es uno de esos sitios que pienso visitar en cuanto pueda, no me moriré sin ir, ni ahí ni al National Gallery de Londres, tampoco he ido al Prado pero ese me queda más cerca. En verano estuve justo en la puerta de entrada del Dalí pero por lo que me contaron sólo se podía acceder previa cita... y había una cola de varios centenares de japoneses!

Un saludo.