Hay casualidades "frapantes", que ayer pensara justamente en el mal que me había hecho ver y leer "Seda" de Alessandro Baricco por la temática que trata y que justo después al llegar a casa comenzase a ver una película ya empezada, atraída por sus decorados de los años 20, para luego descubrir que se trataba de "El amante" de Marguerite Duras. Me quedé a cuadros, pero vi toda la película pese a saber el daño que me hacía una vez me di cuenta de estar viendo lo que estaba viendo.
Casulidades que nos hacen pensar en señales...
y al final queda una frase de la Madame nacida en Saigón:
"Escribir es tratar de saber lo que uno escribiría si uno escribiera".